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VOLKSWAGEN PROMETE EL REGRESO DE BOTONES Y PERILLAS
Una decisión que muchos agradecerán: adiós a los mandos táctiles frustrantes
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Volkswagen parece haber escuchado las quejas. Luego de años apostando por interiores dominados por pantallas, sliders táctiles no iluminados y decisiones de diseño que buscaban parecerse más a un smartphone que a un auto, la marca alemana por fin promete rectificar el rumbo. Kai Grünitz, jefe de Desarrollo Técnico, anunció que los próximos rediseños del ID.3 e ID.4 vendrán con un tablero totalmente renovado, donde volverán a reinar los controles físicos. No es solo nostalgia: es sentido común. Los autos de VW de la década pasada, como el Golf Mk7, eran referencia en ergonomía y funcionalidad, con el equilibrio perfecto entre botones reales y tecnología digital. Pero con el giro minimalista que vino después, la marca perdió ese equilibrio… y también a muchos usuarios.
Grünitz no está solo en este redireccionamiento. Andreas Mindt, jefe de diseño, también fue tajante: a partir del ID.2all, todos los modelos de la marca tendrán botones físicos para las cinco funciones más usadas: volumen, calefacción de ambos lados, control del ventilador y luces intermitentes. “Nunca, nunca más volveremos a cometer ese error. Esto es un coche, no un teléfono”, declaró. Incluso, un informante interno aseguró que el clásico knob de volumen regresará. Y sí, también lo dijo con algo de vergüenza: eliminarlo fue un error. De hecho, modelos actuales como el Golf GTI o el R-Line en Europa ya han eliminado los botones táctiles del volante en favor de unos convencionales. Se espera que la tendencia también llegue a los modelos a combustión. Tal vez no alcancemos la gloria del Golf Mk7, pero vamos en camino.

El regreso de los botones no solo alegrará a los fanáticos de la marca, también podría influir en sus hermanas del Grupo VW como Skoda o Audi. Los primeros modelos en mostrar este nuevo lenguaje interior llegarán en 2026: el ID.2 de producción y los facelift del ID.3 e ID.4. Ahora solo queda cruzar los dedos para que VW cumpla su palabra y nos devuelva la dignidad al subirnos a uno de sus coches.